328-KATIUSKA VRENMON

1002 dibujos y sus extraños personajes.

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328-KATIUSKA VRENMOIN

Si los egipcios se enamoraron de los gatos hasta convertirlos en deidades,sin lugar a duda Katiuska Vrenmon no quedó a la saga .

Todo empezó con aquel peluche que le regaló el abuelo cuando cumplió los dos años de edad.

Era de terciopelo y algodón ,tan suaves a la piel ,que la niña lo adoptó plenamente.

Adónde iba ,ni ella ni sus padres ,podrían olvidarse de su gato Adán,como lo bautizó el abuelo el día en que se lo regaló.

Cuidó durante la niñez con tal esmero a su gato que ,cuando ingresó  a la adolescencia ,no tuvo problema alguno 

en exhibirlo allí donde iba;se podría decir que se convirtió en su compañero de salidas,fiestas y reuniones.

Cumplida la mayoría de edad ,Adán seguia tan dulce como el primer día ,y ella tan apegada a él ,hasta el punto que sus amigos empezaron a tomarla como poseída de extraña parafilia.

Cuando se enamoró del primer chico ,éste  le suplicó  encarecidamente que dejase a Adán en casa ,pero ella no estaba para concesiones y terminó aburriéndose del muchacho.

Entonces pensó que su camino era de la soltería porque no estaba dispuesta a transigir en algo que comprometiese la compañía con Adán..

Cierto día sintió compasión por lo solitario que se hallaba el pobre gato,  y se dijo que no quería verlo en soledad .

Compró ,entonces a un vendedor internacional los mejores gatos peluches que pudiesen ser familia de Adán.

Se hizo con una hermosa gata angora en velveton americano;con un gatico de organza y algodón;con una preciosa gatica de terciopelo..

A los tres dio nombres cercanos al nombre de Adán.

A la gata llamo Eva;al gatico Abel ;a la gatica ,Yomisma ,al no hallar hermana en Abel.

Pero como los tiempos pasan ,su familia de peluches necesitaba dinámica vital, y ya era demasiado tiempo que 

Abel  y Yomisma pasaban en relativa soledad ,razón por la cual decidio crearles familia con sus respectivos hijos.

Dijo a sus amigos:organizaré fiesta de bienvenida para la familia de mis gaticos.

Y así fue.

Contrató con un fabricante persa,especialista en peluche de gatos, la familia para Abel y para Yomisma.

Les dio gata y gato ,además de dos gaticos a cada uno para que las familias gozasen en plenitud familiar.

Su casa se convirtió en  asiento de familia gatuna ,y nada podía ser concebido en su vida ,que no tuviese que ver con sus amados gatos peluches.

Eran ya lejanos los tiempos en los cuales su abuelo le regaló  Adán ,pero su espíritu permanecía anclado en aquellos primeros días de su infancia.

Nunca quiso admitir las acusaciones perniciosas que le hacían de escondida plushofilia ,porque jamás lo fue.

Mas bien ,un raro sentimiento de compañia y de amistad consigo misma ,se había establecido a lo largo de su vida.

Otros amigos ,que sabían del alma humana ,llegaron a clasificarla como narcisista que se miraba en un lago llamado peluche ,lo cual la ofendió profundamente hasta el punto que les retiró el saludo.

Cierto día de otoño,ya envejecida,la condujeron a la residencia de ancianos donde le fue permitido vivir con los peluches que acompañaron su vida.

Nadie pudo afirmar que su vida fue un desacierto ,porque cuatro años después de su muerte ,se halló un pequeño cuaderno con notas que hablaban de la bondad de la vida;de la conciencia de habitar un planeta finito;de la belleza de las flores;de la fidelidad de los buenos amigos;de la ternura de los animales ;y de la estupidez humana que no comprende la brevedad de su existencia.