266-JERZOI GALANTERA
1002 dibujos y sus extraños personajes
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266-JERZOI GALANTERA
Desde niño mostró un raro interés en capturar su imagen y lo hacía tanto pintándose en un espejo o fotografiándose ,cosa que no le seducía tanto como lo primero porque decía que la foto calca y el dibujo,salido de su alma,recalca.Y en esto tenía razón porque comparando dibujos y fotos siempre ganaban aquellos.
El caso es que este interés lo llevó a lo largo de su vida a pintarse treinta y siete mil cuatrocientas treinta y tres veces y otras tantas a retratarse.
Jerzoi Galantera no hizo otra cosa en su vida,ni se interesó por otros aspectos que son propios de la actividad humana.Los pocos que le conocieron lo calificaron como el ser más excéntrico y al mismo tiempo más narcisista que hayan conocido.
El hombre que fue hijo único nunca se separó de su madre pues la mujer enviudó siendo Jerzoi apenas un niño.
Y se piensa que fue su madre quien lo estimuló a su rara vocación de pintarse y fotografiarse de manera obsesiva pues comprendió,cuando falleció su marido,que la vida debía capturarse porque los seres humanos-le decía-somos como fantasmas que aparecemos y desaparecemos rápidamente y solo lo pintado o lo fotografiado guardan fiel memoria de lo que vamos siendo.
-Hijo píntate y fotografíate,ojalá a diario,porque es lo único que queda.
Y Jerzoi atendió el consejo materno y como su padre los había dejado con buena fortuna prometió cumplir dicho deseo el cual se constituyó en su eje vital.
Se dice que acudió a la escuela de bellas artes de la ciudad y aunque esto no pudo ser comprobado el caso es que en su gran colección de dibujos se encuentran algunos trazos de calidad.
El dibujo aquí escogido corresponde al dia que cumplió veinticuatro años,ocho meses y diecisiete días,según dejó reflejado en las notas que añadia a cada trabajo.
Jerzoi siempre se acompañó de sí mismo y solo contó con un amigo quien le propiciaba los materiales para sus dibujos.Se dice que este amigo fue el único amor de su vida y no dejó de él ni dibujo ni pintura,ni fotografía.
Esta curiosa historia de Jerzoi Galantera la recogió en un periódico local José Sanchiza Albarracin y así mismo la transcribo.
No me fue posible obtener datos sobre los años que vivió y lo que sucedió con sus trabajos y mucho menos de su madre y de su amigo del alma.