331-EL HOMBRE QUE PEREGRINABA
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331-EL HOMBRE QUE PEREGRINABA.
Nuncio Castelaniz Bueñor nació en casa de padres acostumbrados a cambiar poco de sitio,se diría que su único centro de gravedad eran su casa y la oficina municipal en la cual trabajaban despachando títulos,escrituras y otras formas de documentos administrativos.
A los ocho años de casados salieron temporalmente de su rutina y de su oficina porque la vida les regaló un niño al cual bautizaron con el nombre de Nuncio Jesus en agradecimiento al nuncio Foligari que les había propiciado,gracias a su influencia con el alcalde,una de las mil viviendas construidas por el ministerio de vivienda.
Nuncio fue criado celosamente por su madre Elena ,y obtuvo permisos especiales para amamantar al niño en uno de los locales de la alcaldía hasta que el niño cumplió un año de edad.
Como no gozaban de la posibilidad de que Nuncio fuese criado en casa por algún miembro familiar,Elena solicitó un permiso especial al ministro de salud para que le fuese permitido criar al niño en el mismo local en que fue amamantado,solicitud que fue avalada por el alcalde dadas las incansables cualidades laborales de Elena y de su esposo Ramón .
Y así, hasta los ocho años ,Nuncio creció entre oficinas y corredores municipales ,siempre vigilado por sus padres , atentos a darle de comer a las horas oportunas las comidas preparadas que traían de casa.
El caso es que Nuncio ,una vez cumplidos los ocho años ,fue ingresado en el internado de la Alianza Per Vitae ,donde habría de cumplir con los pensums propios de un estudiante de primaria y bachillerato.
Cumplidos los diecisiete años ,escribió una breve nota a sus padres:queridos padres,me voy por el mundo!
Los padres preocupados dieron aviso a la policía por tratarse de un menor de edad pero los esfuerzos fueron tan
inutiles que tanto Elena como Ramón ,siempre absorbidos por el trabajo,terminaron por contentarse con las cartas que Nuncio les enviaba sin dirección de remite cada semana.
Se decían-es un buen muchacho y no parece estar metido en asuntos raros; sólo ama el viajar y conocer.
Con este pensamiento dejaron de insistir que se le buscase porque sintieron liberación de sus espíritus que estaban apresados entre los legagos municipales.
Nuncio en el primer año de peregrinar se unió a un grupo de arrieros que seguían las lineas altas de los Andes.
Se le dio mula joven al muchacho para que aprendiese a mandar y el trasegar de arriero.
-queridos padres:estoy de mulero con arrieros.
Me dieron mula joven y la llamo Doncella.
Viajo por el espinazo de los Andes con veinte arrieros más.
De tanto guamazo tengo callos.
Me dieron zurriago para dar perrero a mi mula pero prefiero el hablarle.
Cada semana engarillo,templo toldas y con turegas protejo la carga.
Bien me pagan y de tanto esfuerzo mis brazos se han ensanchado.
Estoy y soy fuerte a pesar de los dieciocho años que cumpliré la próxima semana.
Que pueblos papa!.
Me da siempre el aire de las montañas.;el sol de los amaneceres y atardaceres;la lluvia,el frío y el calor.
Se puede pedir algo más queridos padres? .
Ustedes que siempre han estado a la sombra de las bombillas de la alcaldía son mi aliento para amar el peregrinar y disfrutar la vida.
Los quiero.
Doncella,con sus ojos tiernos y su poderosa fuerza ,los saluda.
Su hijo Nuncio.
Experimentado en la arrieria y con los ahorros conseguidos se internó en una comunidad indígena del Amazonas donde fue adoptado por el chaman el cual vio en el muchacho cualidades de naturista porque parecía adivinar las cualidades curativas de las plantas.
Peregrinó a lo largo de cuatro años entre quince comunidades indígenas de la Amazonia profunda.
Hizo llegar a sus padres una breve carta con un tal Indígena llamado Queroal :queridos padres.Estoy vivo y vivo la vida a plenitud con diferentes tribus del Amazonas.Me han adoptado como a su hijo.Siempre los pienso.Cuándo saldrán de la oficina municipal y se retirarán a disfrutar del sol,el mar,de las nubes,del aire puro?
Los pienso mucho y mi alma siempre está y estará con ustedes queridos padres.
Nuncio,el hijo que los quiere y mentalmente los lleva viajando.
Se perdió Nuncio hasta la edad de veintidós años cuando escribió a su madre:
Querida mamá:me encuentro en un barco japonés trabajando como marino y dando la vuelta al mundo cargando y descargando madera.He conocido tantos pueblos y tan diferentes que solo deseo poder mostrártelos a ti y a mi padre.Aun trabajan en la alcaldía?
Ay queridos padres:la vida es vuelo de pájaro y me parece que tan solo fue ayer que me criaban.
Cuanto deseo viajar sin parar hasta que no tenga fuerzas para caminar!
Ahorro dinero para caminar por los pueblos del mundo.
Soy,me pregunto,el espíritu de ustedes que en los sueños han viajado distantes de la oscura oficina?
Ay padres,los amo mucho.
Nuncio el hijo que nunca los olvida.
Diez años después ,los padres,ya retirados y encanecidos,recibieron una breve nota :
Queridos padres:
Cansado de viajar me encuentro habitando en el monasterio de Thail Jeda .
La vida hasta aquí ha sido un viaje maravilloso.
Continuaremos ustedes dos y yo peregrinando hasta el final.
La vida es una fantástica y única peregrinación.
Los ama profundamente;Nuncio,su hijo.
Que Y aquí se pierde la historia de esta singular familia.
